3 de noviembre
Lunes XXXI
Rm 11, 29-36 Porque de él, por él y para él existe todo. A él la gloria por los siglos. Amén.
Cuando tu Palabra emplea estas frases me embriagas en el abismo de tu insondable presencia en mi vida, Señor y Creador de todas las cosas. Elegido antes de la creación del mundo a ser santo e irreprochable en el amor.
