mis tinieblas

4 de septiembre
Jueves XXII

Col 1, 9-14 El nos ha sacado del dominio de las tinieblas

Las peores tinieblas las propias. E incluso de esa negra espesura me sacas, Señor, del creerme como si fuese dios, de la omnipotencia narcisista, de pensar que todo debe girar a mi alrededor. Tu luz, Señor, me hace ver la luz. En tus manos sigo.