Pascua de Resurrección

20 de abril
Domingo de Pascua

Col 3, 1-4 Ya que habéis resucitado con Cristo, buscad los bienes de alá arriba, donde está Cristo, sentado a la derecha de Dios, aspirad a los bienes de arriba, no a los de la tierra. Porque habéis muerto, y vuestra vida está con Cristo, escondida en Dios. Cuando aparezca Cristo, vida nuestra, entonces también vosotros apareceréis, juntamente con él, en gloria.

Vigilia pascual

19 de abril
Vigilia Pascual

Mt 28, 1-10 Alegraos

Te ofrezco esta jabalina para que, a lo largo de la noche, vayas con ella hacia lo alto, acercándote al que te ofrece la vida resucitada, al que alegra tu corazón, al que te hace saltar de gozo en medio de esta noche santa.

Viernes Santo

18 de abril
Viernes santo

Jn 18, 1-19,42 E inclinando la cabeza, entregó el espíritu

Te ofrezco esta jabalina para que, a lo largo del día, vayas con ella hacia lo alto, acercándote al que muere porque te ama.

Jueves Santo

17 de abril
Misa vespertina de la cena del Señor

Ex 12, 1-8.11-14 Este día será para vosotros memorable
Sal 115 Alzaré la copa dela salvación invocando tu nombre
I Cor 11,23-26 Cada vez que coméis de este pan y bebéis de este caliz, procalmáis la muertre del Señor hasta que vuelva.
Jn 13, 1-15 Habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo.

Te ofrezco estas jabalinas para que, a lo largo del día, vayas con ellas hacia lo alto, acercándote al que está cerca de ti, pues te deja su cuerpo y su sangre para que te alimentes y vivas en él.

Palabra de aliento

16 de abril
Miércoles santo

Is 50, 4-9 Decir al abatido una palabra de aliento

Entrémonos más dentro en la espesura. Y luego a las subidas cavernas de la piedra nos iremos, que están bien escondidas, y allí nos entraremos, y el mosto de granadas gustaremos. Allí me mostrarías aquello que mi alma pretendía, y luego me darías allí, tú, vida mía, aquello que me diste el otro día: El aspirar del aire, el canto de la dulce Filomena, el soto y su donaire, en la noche serena, con llama que consume y no da pena. Y no da pena. Porque estás batido, abatido en el amor del mismo amor.

Luz

Martes santo

Is 49, 1-6 Te hago luz de las naciones

En medio de la tiniebla de esta semana, que cubre el cielo de nubes y llena de tinieblas el orbe de la tierra, tu luz brilla las naciones y tu salvación alcanza los confines del mundo. Véante mis ojos y hazme lumbre dellos, pues solo para ti quiero tenellos.

Bálsamo de nardo

14 de abril
Lunes santo

Jn 12, 1-11 María tomó una libra de perfume de nardo, auténtico y costoso, le ungió a Jesús los pies, y se los enjugó con su cabellera.

Por amor. Solo por amor. Y la casa se llenó de la fragancia del perfume. A nuestro lecho florido, ven, austro, que recuerdas los amores, aspira por mi huerto, y corran sus olores, y pacerá el Amado entre tus flores.
Hace unos días una amiga me regaló un tarro de bálsamo de nardo, de María Magdalena. Para que me vierta en ti. Gracias.

Ramos

13 de abril

Domingo de ramos

Fil 2, 6-11 Se despojó de sí mismo y tomó la condición de esclavo

Eres aclamado como Rey, hosanna, hosanna, bendito el que viene en el nombre del Señor, y ya te has despojado de ti mismo, de tu ser, para quedarte desnudo en manos de Dios. Para hacer su voluntad, para darte por amor, alejado de todo lo que no sea el ser del ser en el abandono más radical, el de la muerte. Comienza hoy tu pasión. Te contemplo, Señor, y te pido me unas cada día más a ti en el amor.

Promesa

12 de abril
Sábado V de cuaresma

Ez 37, 21-28 Haré con ellos una alianza de paz, una alianza eterna. Los estableceré, los multiplicaré y pondré entre ellos mi santuario para siempre; tendré mi morada junto a ellos, yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo.

Esa es tu promesa. Que cada año, en la semana santa, que comienza mañana, revivimos de una manera especial.