26 de febrero
Miércoles VII
Ecl 4, 11-19 El que la ama, ama la vida, y los que madrugan por ella se llenarán de gozo
Sigue el canto, que es elogio, a los que buscan la sabiduría, que eres tú. Amar tu sabiduría, la alegría del evangelio, es amar la vida abundante. Por ti madrugo, Dios, mío, para contemplar tu fuerza y tu gloria. Para lléname de gozo. Porque el gozo en ti es mi fortaleza.