2 de enero
Tiempo de Navidad
Jn1, 19-28 En medio de vosotros hay uno que no conocéis
Estás en medio de nosotros, Señor, y no te conocemos porque no te vemos en nuestros hermanos más necesitados; no te vemos en medio del consumo desaforado de estas fiestas que cada año son un poco más paganas en esta cultura nuestra globalizada; no te vemos en lo profundo de nuestro ser, incapaz de hacer silencio, de parar, de contemplar. No te vemos, Señor, y no te conocemos, y ni te amamos ni te servimos. Y sigues viniendo a nosotros, y nos invitas a ponernos en camino y adorar.
No te conocemos Señor, porque no nos conocemos a nosotros mismos, desde antes de orar tu sabes bien lo que realmente necesitamos y no lo pedimos. Tu sabes lo que tenemos y podemos ofrecer y no lo ofrecemos. Somos ciegos como aquel por quien te compadeciste y le cubriste sus ojos con lodo y con tu saliva, para luego poder ver. Compadécete también de nosotros y quitanos la cegera Señor.