Buen pastor

21 de abril
IV domingo de pascua

Jn 10, 11-18 Yo soy el buen pastor

A tu ser buen pastor me acojo, Señor. Danos entrañas de misericordia, frente a toda miseria humana. Inspíranos el gesto y la palabra oportuna frente a la persona que está sola y desamparada. Ayúdanos a mostrarnos disponibles ante quien se siente explotado y deprimido. Que tu Iglesia, Señor, sea un recinto de verdad y de amor, de libertad, de justicia y de paz, para que todos encuentren en ella un motivo para seguir esperando. Porque tú eres el buen pastor.