2 de abril
Martes de la octava de pascua
Jn 20, 11-18 ¡María!
Pronuncias mi nombre. Y me recreas. Porque en este instante te reconozco, y se te vivo, y se que de ti recibo mi propia, vida, y colmas de esperanza la promesa de la fe, y me mueves al amor, a entregarme a ti sin reservas en mis hermanos. No quiero retenerte, ni monopolizarte, pero puedo decir “he visto al Señor, y me ha dicho esto”
Autor: Nano SM
Religioso Marianista, sacerdote. Actualmente trabajo en la pastoral de un colegio en Madrid, precisamente donde estudié y sentí la llamada a la vocación religiosa.
Desde hace tres años escribo cada día un comentario a la Palabra de Dios, que me ayuda a encarnarla y a darla a los demás. De alguna manera participo en la misión de María, dando a Jesús, dando su Palabra.
Lee todas las entradas de Nano SM