Zarza ardiente

17 de julio
Miércoles XV

Ex 3, 1-6 Moisés se fijó

Déjame fijarme hoy, Señor, en las zarzas que arden sin consumirse ante mis ojos, fijarme en las manifestaciones de tu ser vivo desde siempre y por siempre; déjame acercarme al fenómeno admirable de tu paso por mi vida; hazme contemplativo del misterio de tu presencia; déjame escuchar tu voz llamándome; déjame decirte : Aquí estoy déjame saber que el clamor de los pobres del mundo llega hasta ti, y me envías a dar la buena noticia a los pobres, a proclamar tu año de gracia y liberación. Déjame vivir porque tú estás conmigo.

07.17

Discriminación

16 de julio
Nuestra Señora del Carmen

Ex 2, 1-15 Vió como un egipcio maltrataba a un hebreo

Líbranos, Señor, de cualquier tipo de discriminación activa a cualquier ser humano por cualquier motivo de raza, religión, orientación sexual, opción política, discapacidad. Pon en nuestro corazón la conciencia de que todos somos hij*s tuy*s, de que nos has revestido de tu luz y tu dignidad.

07.16

Trabajos crueles

15 de julio
Lunes XV

Ex 1, 8-14.22 Les impusieron trabajos crueles

Les amargaron con dura esclavitud. Y de nuevo señala tu palabra: les imponían trabajos crueles. Así le sucedió en Egipto al pueblo de Israel, y así sigue sucediendo en nuestros días. La explotación del ser humano por el ser humano que busca su beneficio, su poder, su propia destrucción como ser humano, pues no ve en el otro tu rostro, Señor. Libra de la esclavitud al ser humano que sufre condiciones de trabajo inhumanas. Conviértenos a tu bondad.

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Mandamiento

14 de julio
XV domingo

Dt 30,10-14 El mandamiento está muy cerca de ti: en tu corazón y en tu boca

Amarte a ti sobre todas las cosas y al prójimo como a mí mismo, mandamiento que es más dulce que la miel, que es el mejor de los manjares, mandamientos que pones en mi boca, en mi corazón, en todo mi ser, mandamiento que me haces respirar, que me da la vida, tu mandato alegra mi corazón, es mi fortaleza. Me mandas ser samaritano, dar de comer al hambriento, beber al sediento, dar posada al peregrino, vestir al desnudo…dame tu amor y gracia para hacerlo.

07.14

Vocación IV

12 de julio
Viernes XIV

Gn 26, 1-7 Aquí estoy

De nuevo tu llamada, pronunciando el nombre. De nuevo la respuesta: aquí estoy, Señor, porque me llamas. Aquí estoy, confío en ti, eres mi delicia, me das lo que me pide mi corazón. Aquí estoy, habito tu tierra, me llamas a practicar la lealtad, a hacer el bien y apartarme del mal. Aquí estoy, me mandas como oveja entre lobos, y tú me salvas, me proteges, me libras de la garra caudalosa, de la mano de los adversarios, de mí mismo.

07.12

Vocación III

11 de julio
San Benito,

Prv 2, 1-9 Hijo mío

Así me susurras a voz en grito, con tu Palabra alentadora:
Hijo mío, si aceptas mis palabras y conservas mis consejos, prestando oído a la sensatez y prestando atención a la prudencia; si me bendices en todo momento y mi alabanza está siempre en tu boca; si gustas y ves cada día que bueno soy, si comprendes que eres dichoso cuando acoges a mí, si guardas tu lengua del mal, buscas la paz, y corres tras ella, si dejas todo por mí 0 por el evangelio, recibirás cien veces más, y heredarás la vida eterna.

07.11

Tu misericordia

10 de julio
Miércoles XIV

Salmo 32 Que tu misericordia venga sobre nosotros como lo esperamos de ti

En continuidad con la oración de ayer te digo esta frase del salmo, Señor, que tu misericordia venga sobre nosotros como esperamos de ti. Tus ojos, Señor, están puestos en tus fieles, en los que esperan en tu misericordia. Tú reanimas en tiempo de hambre, tú libras las vidas de la muerte. Tú eres Dios, tan cercano como incomprensible. De ti viene todo don, por eso te bendigo y te doy gracias con la cítara, y te canto un cántico nuevo. En mi nombre, en nombre de toda la humanidad.

07.10

Lucha I

9 de julio
Martes XIV

Gn 32, 22-32 Un hombre lucho con él hasta la aurora

La lucha de Jacob con tu ángel recupera de mi olvido un soneto de Blas de Otero que, llamativamente, en la adolescencia, contribuyó a que me abriera al diálogo contigo. Hoy lo rezo en nombre de tantos que siguen luchando con su sombra, con su muerte, con tu ser, que es el suyo, aunque lo desconozcan:
“Luchando, cuerpo a cuerpo, con la muerte, /al borde del abismo, estoy clamando a Dios. /Y su silencio, retumbando, /ahoga mi voz en el vacío inerte./Oh Dios. Si he de morir, quiero tenerte despierto. /Y, noche a noche, no sé cuándo/ oirás mi voz. Oh Dios. Estoy hablando/solo, arañando sombras para verte (…)”

07.09

Vocación II

8 de julio
Lunes XIV

Gn 28, 10-22ª Yo estoy contigo

Esto escucho en mi interior, esto se con una certeza tan inaudita que me asusta al tiempo que me conforta: Tú estás conmigo, me haces tuyo, soy para ti, desde las entrañas maternas me has escogido, en el bautismo me has incorporado a Ti de una manera especial. Tú estás conmigo, Señor, Dios mío, confío en ti, me proteges porque conoces mi nombre, te invoco y me escuchas, me haces vivir.

07.08