9 de junio
Domingo X
Gal 1, 11-19 Me llamó por su gracia
Me escogió desde el seno de mi madre, me llamó por su gracia, se dignó revelar a su Hijo en mí, para que lo anunciara. Y así, Señor, una y mil veces a lo largo de la historia se repite tu historia de amor con cada uno de los que nos encontramos, inesperadamente, una vez y cada día, escogidos, llamados, anunciados, revelados, enviados por ti, para proclamar las maravillas de tu bondad y tu amor para con nosotros. Gracias.
Has dicho tu Palabra
que aún resuena en mi interior
y me mueve misteriosamente
hacia tu encuentro
Tú, Señor, me escogiste desde el seno materno, me llamaste por mi nombre, me saliste al encuentro y me dejaste descubrirte en la cruz y que te reconociera resucitado, me enviaste a anunciar la buena noticia del evangelio y proclamar las maravillas de tu bondad y tu amor para con nosotros. Gracias por dejarme escuchar tu voz y tu llamada en medio del ruido de la vida.
De corazón a corazón
en un susurro
en un grito
Directo