17 de enero
Viernes I
Mc 2, 1-11 Todos se quedaron atónitos y daban gloria a Dios
Verte a ti actuar, hablar, sanar, acercarte al hombre y a la mujer concreta que padece enfermedad, tristeza marginación, ver tu humanidad en medio de nuestra historia, en medio de nuestro ser, hace que siembre se siempre en nuestros corazones el agradecimiento, tras el estupor y la maravilla de nuestra mirada, que no alcanza a contemplar tanto bien, tanta bondad, tanta belleza, tanta verdad. Gracias, Señor, por el don de tu presencia en medio de nosotros.
Señor, tu paso por la tierra, fue para salvarnos de TODO.
Quiero ver tu humanidad, y tu Divinidad, en todos y cada uno de mis hermanos.