4 de noviembre
Domingo XXXI
Mc 12, 28-34 Con todo el corazón, con todo el entendimiento, con todo el ser
Amarte así. Con todo mi ser. Sin reservarme espacios. Sin reservarme tiempos. Sin reservarme pensamientos: todo tuyo, en todo lugar, en todo momento. Mi vida en tus manos. Se que no es así, pero tu gracia me mueve a amarte de todo corazón, con todo mi entendimiento, con todo mi ser. Y me mueves a amar al prójimo como a mí mismo.
![](https://dimeunapalabra.marianistas.es/wp-content/uploads/2018/10/11.04-300x205.jpg)