Purificados

7 de marzo
Martes II de cuaresma

Is 1, 10.66-20 Aunque vuestros pecados sean como escarlata, quedarán blancos como la nieve

Esa promesa es una realidad en mi vida. Tu perdón y tu paz, la posibilidad que me das siempre de comenzar de nuevo, más blanco que la nieve, con más luz que el sol de la noche y las estrellas de las aguas marinas.