12 de noviembre
XXXII domingo
I Ts 4, 13-17 No queremos que ignoréis la suerte de los difuntos para que no os aflijáis como los hombres sin esperanza.
Está bien recibir, después de esta semana tan intensa en la que hemos celebrado el tránsito de papá hacia la otra vida, esta confirmación tuya, Señor. “Pues si creemos que Jesús ha muerto y resucitado, del mismo modo, a los que han muerto, Dios, por medio de Jesús, los llevará con él. Ahí reside nuestra esperanza, y el poder decir creo en la vida eterna”. Gracias por el don de la fe, de la esperanza, de la caridad.