9 de abril
Lunes octava de Pascua
Mt 28, 8-15 Alegraos
Alegraos, alegraos, alegraos. Es la invitación de la Pascua, tu invitación como resucitado. Alegraos, no tengáis miedo. Escucho tus palabras, Señor, y me digo que quiero dejarte vivir en mi resucitado, que quiero que la alegría de la pascua llene de tu claridad, de tu luz, de tu vida mi vida. Que quiero dejar mis miedos, tan ególatras, en tus manos, para que los transformes en fuente de gracia y gozo pascual.