16 de enero
Sábado I
Mc 2, 13-17 Sígueme
Porque no he venido a llamar a los justos, sino los pecadores. Porque no necesitan médico los sanos sino los enfermos. Porque me he enamorado de la humanidad, de su carne, y por eso la he compartido. Porque te amo y me ofrezco a ti. Sígueme, para siempre, sígueme.

Tú llamada es clara. Sé que soy pecadora y tú me invitas a serte fiel. Mi corazón te corresponde y te ruega me ayudes a la conversión, que sanes mi alma y yo me purifique.
¡Gracias Señor por tu Venida!