martes santo

12 de abril
Martes Santo

Is 49, 1-6 Te hago luz de las naciones

Nos visitará el sol que nace de lo alto. Qué ciertas se hacen estas palabras aquí, en la bendita y sagrada tierra donde naciste, donde paseaste. A las siete de la mañana celebramos la eucaristía en la capilla del monte e las bienaventuranzas.

Beati mundo corde quoniam ipse deum viderunt. Esta bienaventuranza, que pones ante mis ojos, e todo un programa de vida, que solo tu gracia me permite: ser limpio de corazón, purificar mi corazón de toda maldad, quedarme libre de apegos y deseos. (De mi diario en Tierra Santa, martes santo de 2009)

Lunes Santo

11 de abril
Lunes Santo

Jn 12, 1-11 Le ungió a Jesús los pies y se los enjugó con su cabellera

Vámonos a estar juntos en un lugar apartado. Tú yo. En intimidad, Señor, en intimidad contigo. Derramar en tu cuerpo mis perfumes, la libra de nardo. Me pierdo en ti .(…) Todo ello me impresiona por dentro. Y me ofrezco a ti. Hágase también en mí según tu Palabra. Con el Espíritu de María. (De mi diario en Tierra Santa, lunes santo de 2009)

Domingo de ramos

10 de abril
Domingo de Ramos en la Pasión del Señor

Lc 19, 28-40 Bendito el Rey que viene en el nombre del Señor

Procesión de Ramos, desde Betfagé a Jerusalén. Preparación de la procesión con un calor agobiante Una multitud que ha llegado desde los confines de la tierra, un calor de justicia, la catolicidad de la Iglesia hecha visible, gracias, Señor, por esta procesión, en la que tú vas entre nosotros, que vamos cantando Hosanna y Aleluya en tu honor. ¿Cuánto tardaríamos en traicionarte, en serte infieles antes de que el gallo cante dos veces? (De mi diario en Tierra Santa, domingo de ramos de 2009)

Como un pastor

9 de abril
Sábado V semana cuaresma

Cántico Jeremías 31 El Señor nos guardará como un pastor a su rebaño

Es la certeza inquebrantable. Tú el buen pastor, que me guías hacia verdes praderas, que me conduces hacia fuentes tranquilas, que reparas mis fuerzas. Tú, el buen pastor, que reparas mis fuerzas. Tu vara y tu cayado me sosiegan. A tu sabor reposo…

Entrañas y corazón

8 de abril
Viernes V semana cauresma

Jr 20, 10-11 tú sondeas las entrañas y el corazón

Sondeas los abismos, desconocidos, y sondeas mis entrañas y mi corazón, tú me sondeas y me conoces, conoces cuando me siento y me levanto, no ha llegado la palabra a mi boca, en esta misma oración, y ya Señor te la sabes toda, por eso acallo y modero mis deseos, como un niño en brazos de su madre.

Adoró

7 de abril
Jueves V de cuaresma

Gn 17, 3-9 Abrán cayó rostro en tierra

Y te adoró. Como yo ahora. A Ti gloria y alabanza por los siglos.

Sondeas los abismos

6 de abril
Miércoles V de cuaresma

Cántico Daniel Bendito eres tú que sentado sobre querubines sondeas los abismos

No se bien, Señor, qué son los querubines, y la verdad es que ya pueden aletear que no me mueven para quererte, ni tampoco sé bien qué digo cuando señalo que sondeas los abismos…solo sé que quiero bendecirte y darte gloria por los siglos…

Mordedura

5 de abril
Martes V de cuaresma

Números 21, 4-9 Cuando la serpiente mordía a alguien…

…este miraba a la serpiente de bronce y salvaba la vida. Y así te miro, crucificado, cuando la serpiente me muerde, y siento en mi carne su veneno…te miro en la cruz, te miro crucificado, y te pido, una vez más, que me libres del mal, que me salves. Y que me dejes caer en los brazos de tu misericordia.

Tirar la piedra

4 de abril
Lunes V de cuaresma

Jn 8, 1-11 el que esté sin pecado que tire la primera piedra

Pues eso. Y aún así seguimos condenando, y discriminando, sin comprender que lo que condenamos en los demás es lo que no tenemos capacidad de condenar en nosotros mismos. Solo tu misericordia, Señor, cuando nos abre a la misericordia con los demás, nos libera y nos hace comprender que nunca podemos alzar la mano para tirar la piedra.

Pérdida

3 de abril
V domingo de cuaresma

Fil 3, 8-14 Todo lo considero pérdida

…comparado con la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor. Por el lo perdí todo, y todo lo considero basura con tal de ganar a Cristo y ser hallado en él.
Fue la lectura que elegí para mis votos perpetuos. Aspiración. Y realidad. Entremezcladas. Por ti. Tú el todo de mi vida. En tus manos estoy, señor. Gracias.